A través de un cómodo camino blindado por centenarios alcornoques, algarrobos, madroños…, alcanzarás el territorio de los pinsapos, que se extiende bajo la imponente mirada de la Sierra del Pinar y, muy en especial, de El Torreón.
Un recorrido que te sorprenderá a cada paso con las múltiples formas que las grandes masas de roca caliza han ido adoptando a través del tiempo debido a su disolución. Lapiaces de grandes pináculos, torrecillas de punta redondeada o dolinas se alternan en un escenario natural en el que, además, podrás descubrir gran parte de la historia ganadera de Grazalema.
Un sendero que comienza a dibujarse entre algarrobos y encinas y que, poco a poco, nos sumerge en un paisaje que desemboca donde tiene su nacimiento el arroyo de los Charcones, que recoge las aguas de la Sierra de Albarracín y las vierte hacia el valle de Tavizna.